Reducir la ansiedad y la depresión a través de la presencia mental.
Hola a todos! Bienvenidos a “pensamientos profundos” con Natasha. :)
Dirás, esta es una pregunta extraña, sin embargo, a menudo hago esta pregunta a mis clientes. La mente es muy poderosa, y si la utilizas sabiamente puedes tener más sentimientos de paz y felicidad. De lo contrario, la mente puede crear problemas de salud mental, problemas de salud física, irá, dificultades con los demás, problemas de rendimiento del trabajo, entre otros. La meta de este blog es compartir una herramienta para tu caja de herramientas, para ayudarte a comenzar a vivir con una mentalidad más saludable. Así que exploremos esta pregunta...
A menudo, la gente vive mucho en el "pasado", con pesar. Tienen pensamientos como:
"¿Por qué hice eso?”
“¡Ojalá no fuera así!”
“Debería haber dicho algo.”
“Debería haberme ido antes."
No somos capaces de cambiar nada del pasado y esto nos deja muy vacíos y tristes. Esto se convierte en depresión.
Por otro lado, cuando vivimos en el futuro, esto es algo completamente diferente. Cuando tenemos pensamientos de “¿Qué pasa si'.....?” como:
“¿Qué pasa si fallo?”
“¿Qué pasa si no les caigo bien?”
“¿Qué pasa si no mejoro?”
Esto crea mucha presión y estrés en nosotros. Este pensamiento catastrófico se convierte en ansiedad.
Estar presente es muy importante no sólo para nuestra salud mental, sino también para las relaciones que nos rodean. Estar mentalmente ausente significa estar allí físicamente, pero nuestra mente está en otra parte. ¿Alguna vez te distraes cuando cenas con un ser querido, o tus amigos se quejan de que tu mente está en otra parte? Otros pueden ver esto como que no estás interesado, estás aburrido o quieres estar en otra parte.
Entonces, ¿dónde deberíamos vivir? ¿Qué pasaría si encontráramos un equilibrio entre aprender del pasado, estar preparados para el futuro, pero vivir en el PRESENTE? Esto significa estar en el momento y disfrutar de lo que está justo frente a nosotros, en lugar de perder el momento porque tu mente está en otra parte.
Aquí hay un paso simple para ayudarnos a dirigirnos al momento que tenemos frente a nosotros: "detener el pensamiento". La idea es que cuando notes que tu mente no está aquí en el presente, detengas ese pensamiento haciendo algo para estar 'presente'. Escucha música, limpia la casa, haz ejercicio, trabaja en el jardín, llama a un amigo, lee un libro, juega con tu perro, canta.
Por ejemplo, la próxima vez que te distraigas porque recuerdes algo que hacer, anota en tu teléfono cuándo vas a hacerlo y luego vuelve al momento. Cuando se acerque la fecha para tomar un examen importante, te dices a ti mismo: "El jueves estudiaré para ese examen, pero ahora mismo voy a cenar con mis amigos". Igual, cuando tengas una gran presentación la semana que viene, recuerda "hoy estoy en el juego de mi hijo y mañana trabajaré en eso". ¡Solo vive en el presente!
Desaprender los malos hábitos, requiere tiempo. Lograr que nuestra mente no esté divagando y cambien hábitos es parte de un proceso que debemos respetar y reconocer que requiere tiempo. Los viejos hábitos son automáticos y surgen naturalmente, sin pensar, por lo que cambiar no es algo que sucede de la noche a la mañana.
¡Ten paciencia contigo mismo y celebra las pequeñas victorias! Quizás la próxima vez que juguemos con nuestros hijos afuera, nuestra mente estará en tratar de atrapar la pelota en vez de el próximo proyecto de trabajo. Cuando pensemos en errores pasados, pensaremos "aprendí mucho de eso" en vez de "¿por qué hice eso?" ¿Qué pasaría si nos permitimos disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, como sentarnos afuera con una taza de café (sin teléfono) y mirar lo que hay físicamente a tu alrededor? Así que ahora pregúntate: "¿Dónde vive mi mente?"
Si esta pregunta te causa mucho estrés o tratando de detener el pensamiento no es suficiente, la terapia puede ofrecer mucho apoyo y herramientas. O, contáctame y te puedo conectar con una terapeuta que puede ayudarte.
Les deseo todo lo mejor -
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